Hacia 1262, quizás inspirado por el ejemplo de sus vecinos los Capetos, Jaime I ordena una serie de investigaciones en los feudos dependientes del dominio real en los condados norcatalanes y también en el conjunto de sus dominios languedocianos. Una treintena de patentes y de mandatos conservados en los registros de la Cancillería demuestran este episodio poco conocido de la política interior del Conquistador.
Es la primera gran investigación general relativa al patrimonio real en la Cataluña Vieja y el Languedoc. Hasta donde sabemos, la mayor parte de la documentación subsistente se conserva en Perpiñán en los fondos de la Procuración Real de los condados de Rosellón y de Cerdaña del Archivo Departamental de los Pirineos Orientales.
Pero el documento más importante es sin duda el Liber Feudorum A. Los 337 documentos compilados en este registro consignan el resultado de las investigaciones feudales iniciadas a partir del 1262 por Jaime I y continuadas por su heredero Jaime II de Mallorca en las tierras de la Cerdanya, el Baridá, la Vall de Ribes, el Conflent, el Capcir, el Vallespir , el Ripollès y la veguería de Camprodon. Es este importante manuscrito el testimonio de las transformaciones sociales y jurídicas fundamentales que tienen lugar de la sociedad catalana durante la segunda mitad del siglo XIII.
Nº Colección: 50
Año de publicación: 2013
Periodo histórico: Alto medieval (siglos VIII-XIII)
Referencia geográfica: Cataluña Norte, Comarcas de Girona, Comarcas de Lleida, Corona de Aragón (antiguos reinos)
Temática histórica: Feudalismo, Monarquía
ISBN: 978-84-9975-419-2
Rodrigue TRETÓN
Rodrigue TRETÓN
Rodrigue TRETÓN
Rodrigue TRETÓN
Rodrigue TRETÓN
Rodrigue TRETÓN
Rodrigue TRETÓN
Compartir contenido